Los TPV virtuales pueden hundir tu negocio

TPV VIRTUAL pueden hundir tu negocio Llevo trabajando varios años con algunas tiendas online, sobro todo en SocialMedia y con el SEO y su analítica. Mucho esfuerzo y trabajo para hacer que la confianza del cliente se vea recompensada y el negocio avance y logre los objetivos marcados.

Después de tanto trabajo: Monitorizaciones, análisis, reprogramaciones de código fuente, linkbuilding, usabilidad, accesibilidad, fidelización… Después de todo eso puedo decir que las pasarelas de pago bancarias, o TPV’s, son el peor recurso que puede implementarse en una tienda online, con permiso de la logística. No me echéis a los perros, dejad que me explique.

Cualquier persona que se plantee lanzar una tienda online en serio deberá trabajar duro para disponer de una tienda atractiva, con fotos y descripciones de calidad, una sistema de gestión eficiente, una web accesible y “usable”. Debería poner en marcha campañas o acciones de marketing online u offline que mejoren la visibilidad de la web como campañas SEM o acciones en SocialMedia. Además sería recomendable invertir en SEO para llegar a los clientes potenciales y en analítica web que permita conocer cómo, cuando donde, porqué… acceden los usuarios a la tienda. Tras poner en marcha todo esto y habiendo realizado un importante desembolso, con mucha paciencia y dedicación total, un usuario entra en la tienda, la web le ofrece confianza, encuentra fácilmente lo que busca, tiene visible toda la información que necesita y el precio es competitivo… Perfecto, el usuario va a comprar…Está comprando… Va apagar… ERROR!!!! “El sistema no puede verificar su tarjeta de crédito”… ¡Venga ya! ¿En serio? Pues si.

Unas veces por culpa del usuario, otras por los navegadores incompatibles y otros tantos factores que no hay forma de entender la compra falla.
Según mi experiencia entre el 20 y el 30% de las operaciones que se realizan mediante TPV bancario acaban en error, o lo que es lo mismo, en una invitación a nuestro visitante a irse a otra tienda. Todo el trabajo realizado acaba con una operación fracasada y en un usuario (que no cliente) frustrado.

Personalmente creo que no debe prescindirse de este sistema de pago ni mucho menos, pero quizá reorientado hacia otros sistemas online de pago mediante tarjetas de crédito que en España están menos extendidos tipo Paypal, Checkout… Estos sistemas resultan más caros (véanse tarifas Paypal, tarifas Google Checkout) que las comisiones que cobran los bancos por sus TPV’s pero fallan una millonésima parte que estos últimos y “tragan” casi con todo ofreciendo niveles de seguridad igual o superiores a los ofrecidos por las entidades bancarias.

¿Cuanto suma al final del año el total de las operaciones que no se han concretado por errores de las pasarelas bancarias? Echa cuentas…

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